lunes, 15 de junio de 2015

FUNCIONES DE INTEGRACIÓN

Reciben esta denominación todas las formas de expresión de nuestra personalidad, manifestadas como síntesis de nuestra conducta integral y unitaria, son la resultante total de nuestras funciones psicológicas y de nuestra vida misma, se expresan como un todo. Las funciones de integración están representadas por: la personalidad, el temperamento y el carácter.

EL CARÁCTER



Todos los rasgos mentales o de conducta de una persona, la suma de todos los rasgos psicológicos, se forma por los hábitos de comportamiento adquiridos durante la vida. Conjunto de las maneras habituales de reaccionar de un individuo. 

EL TEMPERAMENTO

Es una función que constituye el núcleo de las personalidades; representa la constitución orgánica y heredada, a la vez que el la expresión de los impulsos primitivos y de las funciones afectivas.

LA PERSONALIDAD


La personalidad es la conjunción del temperamento y el carácter en una única estructura. Representa un patrón profundamente incorporado de rasgos cognitivos, afectivos y conductuales manifiestos, que persisten durante largos periodos de tiempos.
La actividad volitiva

Es una forma de actividad voluntaria que supone la previa conciencia de un fin. Se diferencia de la actividad involuntaria porque en ésta no hay plena conciencia de su personalidad. La actividad volitiva es propia sólo del ser humano, surge y se desarrolla en la interacción.

Comprende los siguientes aspectos:
    
    Toma de conciencia de una necesidad o un fin.
   
    Planificación de las acciones que permiten el alcance de este.
   
    Puesta en práctica de lo planificado.
  
   Enfrentamiento con obstáculos que pueden encontrarse en el en curso de la acción.


La vida volitiva


Voluntad (del latín voluntad) es la potestad de dirigir el accionar propio. Se trata de una propiedad de la personalidad que apela a una especie de fuerza para desarrollar una acción de acuerdo a un resultado esperado. La voluntad implica generalmente la esperanza de una recompensa futura, ya que la persona se esfuerza para reaccionar ante una tendencia actual en pos de un beneficio.

La voluntad también está relacionada al poder de elegir de la conciencia, el sentimiento y la acción.
PROCESOS DE LOS ACTOS VOLITIVOS



En la actividad del ser humano es posible distinguir dos tipos de acciones, las involuntarias y las voluntarias. Las primeras son aquellas que no presentan una regulación premeditada en su ejecución la cual tiene un carácter impulsivo (relación incondicionada Ej.: Retirar la mano de una superficie caliente).Las acciones voluntarias son las que se realizan con un fin consciente ejemplo: Elaborar un proyecto de investigación. La mayoría de las acciones voluntarias

Particularidades de la Actividad Volitiva:

1) La conciencia de libertad del hombre para tomar decisiones, él elige sus propios objetivos.

2) Su responsabilidad ante la decisión tomada es decir, él es responsable del resultado de sus actos.


3) La decisión la toma el hombre en última instancia, como ente social, sobre la base de sus motivaciones, las cuales están socialmente condicionadas.

Cualidades volitivas de la personalidad:


La actividad no se expresa de la misma manera en todos los hombres. Los idealistas explican la actividad volitiva apelando a una fuerza de origen desconocido, o divino así plantean que, el hombre cuando persiste en la acción y se sobrepone a los reveses lo hace porque tiene “mucha fuerza de voluntad”, en cambio, el apocado tiene poca o ninguna.


Independencia: Determinación por el sujeto de su propia actuación, guiándose por sus convicciones, conocimientos e ideas. Dependencia: El sujeto se somete fácilmente a influencias ajenas.

Firmeza: Cuando se adopta sin vacilación y oportunamente decisiones bien fundamentadas que lleva a cabo.

Indecisión: Se manifiesta en dudas, vacilaciones durante la lucha de motivos y la ejecución.